¿Se libró el riesgo inflacionario? Se tambalea baja de tasa en marzo

La trayectoria de la inflación de servicios ha establecido "un piso" al descenso de la inflación general, con factores de presión locales que colocan a Banxico en un predicamento de credibilidad.
11 Enero, 2024 Actualizado el 11 de Enero, a las 19:15
Los precios de los servicios de hoteles, restaurantes, entre otros servicios, siguen al alza (Foto: Pexels)
Los precios de los servicios de hoteles, restaurantes, entre otros servicios, siguen al alza (Foto: Pexels)
Arena Pública

La guerra en contra de la inflación aún está lejos de haberse ganado lo que podría retrasar la decisión del Banco de México (Banxico) de reducir la tasa de referencia en su anuncio del 21 de marzo, como prevén una gran mayoría de economistas.

Los incrementos en los precios de los servicios es el gran obstáculo para que la inflación general retome su senda de descenso, interrumpida en octubre. La inflación mensual se incrementó 0.71% en diciembre, el mayor incremento para un mes similar en la última década y muy por encima de los pronósticos de los economistas que esperaban 0.60% para el mes. En términos anuales, la inflación en diciembre alcanzó 4.66%, después del 4.32% de noviembre y 4.26% de octubre, cuando tocó su nivel mínimo de los últimos tres años.

El foco de los observadores se ha concentrado en la inflación de los servicios por su resistencia a bajar. En el segundo semestre del año pasado, la inflación de servicios osciló entre 5.15% y 5.34% a tasa anual; y en los tres últimos meses fue de 5.34%, 5.28% y 5.33%, respectivamente, sin ninguna concesión para seguir reduciéndose.

"Si se proyecta linealmente hacia adelante se sugiere que la inflación de servicios pone un “piso” al descenso de la inflación general", dijo Sergio Luna, economista en Jefe del Grupo Financiero Mifel, cuestionado al respecto. El martes, Luna publicó en la red X un gráfico con la evolución de la inflación de mercancías y de servicios en la que se observa claramente la resistencia que plantea la inflación de servicios para que la inflación básica o subyacente siga a la baja.

Tomado de Sergio Luna en red "X"

 

"Aún dentro de servicios hay diferencias muy importantes en precios relativos. Los asociados a transporte, turismo, servicios profesionales y colegiaturas son los que muestran mas presiones", dice Luna quien posee un doctorado en Ciencias Económicas por la Universidad de Londres.

En diciembre, los precios de los servicios educativos (colegiaturas) se incrementaron 6.60% anual, mientras que los otros servicios, que incluye restaurantes y similares, servicio de telefonía móvil, mantenimiento de automóvil, consulta médica, servicios turísticos en paquete, entre otros, se incrementaron 6.46%, más del doble de la inflación objetivo puntual del banco central. 

La minuta de la última reunión de política monetaria de la Junta de Gobierno de Banxico de diciembre, revela la preocupación entre los miembros de la Junta por la inflación de servicios que "aún no muestra un claro punto de inflexión a la baja", si bien algunos miembros la explican por "la mayor demanda relativa por servicios después del confinamiento" lo que ha permitido que las empresas eleven los precios por presiones acumuladas en sus costos. Uno de ellos -no identificado en la minuta- dijo que "es natural continuar observando ajustes en los precios relativos y ello no refleja necesariamente la ocurrencia de nuevas fuentes de presiones inflacionarias".

Inflación de servicios, inflación local

En el horizonte inmediato, la resistencia de los servicios a reducir los incrementos de precios supone un problema para que la Junta de Gobierno inicie la baja de la tasa objetivo en marzo, como lo sugirió recientemente la gobernadora Victoria Rodríguez en entrevistas con medios. La inflación en los servicios médicos, de transportes, educativos, de servicios profesionales, de hoteles y restaurantes, responde básicamente a factores locales que van desde los incrementos de los salarios reales, hasta costos adicionales por la inseguridad pública, y que representarían un problema adicional para que el banco central alcance su objetivo del 3.0%.

"La inflación termina en la segunda quincena de diciembre de 2023 en 4.86% anual, con la subyacente en 4.98%. Lo difícil es ya bajar esos números a 3.0%", escribió Marco Oviedo, estratega senior para América Latina del brasileño XP Investimentos, en su cuenta de X. Esta dificultad que apunta Oviedo para seguir reduciendo la inflación, ya se observaba en la encuesta que publicó Banxico el 15 de diciembre. Si bien el 41% de los economistas encuestados prevén que la inflación para 2024 se ubicará en un rango de 3.6 a 4.0%, el porcentaje de quienes pronostican un rango entre 4.1 y 4.5%, subieron de 26% en noviembre a 32% en diciembre.

"Para Banxico el asunto es que se ve muy difícil la convergencia al objetivo de 3% en el horizonte de incidencia de política", responde Sergio Luna, lo que le complica a los miembros de la Junta la decisión de política monetaria en marzo. Para Luna, la Junta tiene dos alternativas: "O mantiene la tasa como está hasta que, efectivamente, la inflación ceda más, cuestión que veo hasta el segundo semestre; o recorta la tasa e implícitamente señala que está satisfecha con que la inflación baje, aunque no llegue a su objetivo... claro que aquí el tema es su credibilidad".

Pero una abrumadora mayoría cree que el Banco de México recortará su tasa en 25 puntos base (pb) a más tardar en su comunicado del 21 de marzo. En la encuesta de Citibanamex, publicada el 5 de enero, de los 29 grupos de economistas encuestados, 27 esperan la primera reducción de tasa en este primer trimestre. Para Luna, una reducción de 25 pb en marzo, "más que señalizar algo, metería ruido".