Morena en el Senado ¿chantaje al Trife?

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación debe resolver si el PES -aliado de Morena- mantiene o no su registro.
26 Noviembre, 2018

A pocos días de que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tome protesta como presidente constitucional de México y casi 5 meses después de la jornada electoral del 1° de julio, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPFJ) tiene pendiente resolver dos asuntos de suma importancia para Morena esta semana: el registro de uno de los partidos asociados a Morena y la elección de gobernador en Puebla.

El primero de ellos es que el Partido Encuentro Social (PES), el ala más conservadora del espectro ideológico nacional y parte de la coalición ganadora con el Partido del Trabajo y Morena, perdió su registro como partido político nacional en septiembre de este año por no haber obtenido el 3% de la votación en los últimos comicios federales, según lo determinó el Instituto Nacional Electoral (INE).

En ese momento, el representante de Morena ante el INE, Horacio Duarte, señaló que el PES formaría –aun sin registro-- parte de la coalición que gobernará México a partir del 1° de diciembre y que Morena promovería desde el poder legislativo la revisión de las reglas electorales vigentes, incluyendo el porcentaje necesario para conservar el registro – lo cual implicaba garantizarle su financiamiento público al PES.

Lo que creímos escuchar entonces fue que habría apoyo de Morena hacia el PES, si no bajo las reglas vigentes, cambiándolas. Morena siendo Morena.

Como era de esperarse, el PES apeló ante el TEPJF la pérdida de su registro, esperando revertir el acuerdo del INE, confiado en que sus bancadas tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados le servirían de argumentos en la batalla política.

Pero apenas el jueves pasado, 22 de noviembre, la promesa de Horacio Duarte hacia el PES adquirió relevancia nuevamente. Un senador de Morena, Cruz Pérez Cuéllar, presentó una propuesta para reformar la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y, con ello, reducir la permanencia de cuatro de los siete magistrados del TEPJF.

Lo que creímos escuchar entonces fue que habría apoyo de Morena hacia el PES, si no bajo las reglas vigentes, cambiándolas. Morena siendo Morena.

Como era de esperarse, el PES apeló ante el TEPJF la pérdida de su registro, esperando revertir el acuerdo del INE, confiado en que sus bancadas tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados le servirían de argumentos en la batalla política.

Pero apenas el jueves pasado, 22 de noviembre, la promesa de Horacio Duarte hacia el PES adquirió relevancia nuevamente. Un senador de Morena, Cruz Pérez Cuéllar, presentó una propuesta para reformar la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y, con ello, reducir la permanencia de cuatro de los siete magistrados del TEPJF.

Con el tiempo encima -porque el 1° de diciembre se avecina- el TEPJF debe resolver sobre si el PES mantiene o no su registro a pesar de la determinación del INE, del mandato constitucional y del fundamento legal aplicable.

A pesar de todo ello, hoy cabe la posibilidad de que el PES mantenga su registro pues las reglas electorales son flexibles. Ya lo hemos visto con la ratificación de la elección para góber en Coahuila a pesar del rebase del tope de campañas. Ya lo hemos visto con la anulación de los resultados electorales en Monterrey a pesar de que en el municipio contiguo, Guadalupe, con una situación similar, se mantuvo el fallo de la sala regional.

Lo grave no es que el Senado –en pleno uso de sus facultades legislativas- busque reducir el plazo de permanencia en el cargo de cuatro los magistrados. Recordemos que el 20 de octubre 2016 el Senado eligió a los siete magistrados del TEPJF para ocupar sus posiciones de manera escalonada (dos magistrados por tres años, dos más por seis años y los tres restantes por nueve años), pero en noviembre de ese mismo año los legisladores ampliaron la permanencia de cuatro de los siete magistrados. Esta ampliación de su periodo de encargo, al ser posterior a su nombramiento, tuvo graves costos en la credibilidad del TEPJF.

Es decir, el problema radicó en que los legisladores ampliaron el plazo de permanencia de los magistrados de manera posterior a su selección en franca violación a sus atribuciones legislativas, debilitando de origen la gestión de la actual conformación del Tribunal Electoral.

Es por ello que la iniciativa del senador de Morena para reducir los plazos sea tan relevante, pues jurídicamente le asiste la razón (no puedes nombrar un juez y luego decidir que sea juez por más tiempo sin dañar su legitimidad), pero en este momento el Tribunal Electoral debiera gozar de autonomía; no ser objeto de chantajes. Lo grave es que Morena presente esta iniciativa justo cuando los magistrados electorales decidirán sobre si el socio de Morena pierde o no el registro.

Pareciera que los magistrados electorales están siendo rehenes de un chantaje político que amenaza su permanencia si no votan por mantener el registro del PES, pero si votan por mantener el registro todos pensaremos que lo hicieron por presión, no por convicción jurídica.

Del segundo tema ya ni hablamos: el triunfo de Martha Érika Alonso (PAN) en Puebla parecía estar pactado con Morena porque de suyo era irreal que hubiera menos votos para gobernador que para presidente en las mismas casillas.

Sin embargo, es de sabios no atribuir a la mala fe lo que es producto de la incompetencia. Se sabe que el instituto electoral en Puebla no organizó bien sus comicios y fue el INE quien tuvo que rescatar la elección local poco tiempo antes de la elección. ¿El resultado? En este escenario de presiones políticas no debiera sorprendernos si el TEPJF acaba anulando esa elección.

El Tribunal Electoral (poder judicial) no debiera estar sujeto a la presión política de otro poder. Es legítimo que el senado busque revertir la ampliación de los periodos de encargo de los magistrados. Pero es irresponsable hacerlo a costa de la autonomía de las decisiones electorales. En estos tiempos de incertidumbre, necesitamos actores políticos tantito más responsables.

 

* Sofía Ramírez Aguilar es maestra en economía, analista política y miembro de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.

@Sofia_RamirezA

Sofía Ramírez Aguilar Sofía Ramírez Aguilar Directora General de México, ¿Cómo Vamos?. Maestra en Economía. Ha asesorado al PREP del INE y del Instituto Electoral de Tamaulipas. Participó en proyectos de investigación académica con el ITAM y de emprendimiento social con la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey. Fungió como ministro representante de la SEGOB en la Embajada de México en Washington D.C. Fue Directora Adjunta de Investigación Aplicada en Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.